Si los faros de tu vehículo son amarillos y opacos, tienes que leer este producto, donde te mostramos un truco a fin de que luzcan como nuevos sin gastar un centavo.
En solo diez minutos, puedes eliminar el amarillo de los faros de tu vehículo y devolverlos a la iluminación del primer día, sin gastar bastante dinero, sin perder tiempo en lavados de turismos.
El procedimiento de premezcla
- Vierta una pequeña proporción de bicarbonato de sodio en el envase.
- Exprime medio limón en el bicarbonato de sodio.
- Revuelve hasta conseguir una pasta.
- Utilizar la pasta en el faro y aguardar unos minutos.
- Enjuague el faro con agua.
- Seca el de adelante con una toalla de microfibra.
- Vierta una pequeña proporción de bicarbonato de sodio en el envase.
- Toma medio limón y sumérgelo en bicarbonato de sodio. Exprime el limón mientras que haces esto a fin de que el bicarbonato de sodio se pegue.
- Coloque la cal cubierta de soda a cada faro fuertemente despacio.
- Mira todo el faro con un movimiento circular.
- Lava el faro y sus aledaños con agua.
- Seca la región con una toalla de microfibra.
Opciones para adecentar los faros del automóvil
Hay múltiples maneras de adecentar los faros. Ciertas mucho más conocidas son utilizar pasta dentífrica o utilizar espuma de rasurar. El primero de ellos logra adecentar medianamente esta mugre que se amontona en los faros. No obstante, debemos pasar un buen tiempo fregando para conseguir un resultado aceptable donde no queden tan refulgentes como nos agradaría. Algo afín pasa con la espuma de rasurar, si bien el resultado es aún peor.
Una aceptable opción es pulimentar los faros de tu vehículo de manera profesional. Si tenemos pulidora, es una alternativa muy aconsejable. Aun tras pulirlos, tenemos la posibilidad de barnizarlos con aerosol acrílico para ofrecerle un toque mucho más refulgente a los faros. Si no poseemos una pulidora, por supuesto tenemos la posibilidad de llevar el coche al estacionamiento y que ellos hagan todo eso por nosotros. Pero el propósito de este producto es ofrecer una última opción, mucho más rápida y económica.
Pero, ¿cuándo puedes arreglar un faro en vez de sustituirlo?
Entre las reparaciones urgentes que se le puede llevar a cabo a un faro es el pulimentado. El plástico transparente que integran los faros, al exponerse al sol y a la intemperie termina quemándose y dañando la área exterior haciéndola opaca, afectando la iluminación y la seguridad en la conducción.
Si los faros están desafilados, va a ser fundamento bastante a fin de que ITV nos dé una opinión desfavorable y debamos elegir qué llevar a cabo, pulimentar o cambiar los faros. Para recobrar los faros apagados, contamos la opción de pulimentar el plástico para recobrar la transparencia y arreglar de esta forma el inconveniente, con un coste económico bastante menor. Es una manera que va a hacer que recobremos el faro y que la iluminación sea bastante superior y mucho más eficiente, incrementando la seguridad en la conducción.