La inmadurez sensible afectivo tiene unos ‘síntomas’ de de qué manera actúa: Hay necesidad del otro en todo momento, los espacios de soledad son una tortura, no tienen la posibilidad de estar sin pareja, son desconfiados y les cuesta para crear una relación de justicia, desconfían y suponen que alguno puede
La madurez en una relación es primordial. En tiempos bien difíciles es lo que nos puede evitar reparar las cosas o caer en una pelea esencial que nos lleve a una crisis. En el momento en que andas con un individuo inmadura, la relación tiene una sucesión de retos que de otro modo no tendría y esa persona debe sobrepasar y madurar transcurrido el tiempo.
En este vídeo te comparto las señales que señalan que andas con un individuo inmadura.
La agresión es una parte de la inmadurez sensible
Aun en el momento en que se hieren los sentimientos, un individuo madura no se pone a la protectora frente a la menor crítica. En una relación saludable, los dos integrantes de la pareja tienen que sentirse cómodos opinando probables inconvenientes y haciendo un trabajo juntos para resolverlos.
Absolutamente nadie debe caminar de puntillas por temor a incordiar a su pareja. Un individuo que padece de inmadurez sensible se pone a la protectora frente cualquier cosa, en especial si está equivocada. Si le afirmas algo a esta persona, puedes prepararte para una rabieta o aun insultos.
No sabe expresar sus sentimientos
La evolución escencial de todos nosotros pasa por determinadas etapas donde se completa la timidez y la expresión de los sentimientos, aprendiendo a gestionarlos con mayor sencillez . La madurez nos ofrece la base para ello.
En caso contrario, la inmadurez sensible crea una barrera que nos impide expresar nuestros sentimientos con claridad, sencillez o aun abochornarnos de llevarlo a cabo. Esta situación en la pareja puede tensar la relación, con altos escenarios de frustración y agotamiento.
¿Qué es la madurez?
Madurez es una palabra que todos oímos frecuentemente en nuestro día a día: “debo madurar mucho más”, “eres un inmaduro”, “mira a tu primo, es un individuo muy madura”, etcétera. . . Pero bueno, ¿qué es la madurez? ¿A qué hablamos en el momento en que charlamos de madurez en Psicología?
Sigmund Freud, el reconocido sicólogo que creó el modelo del Psicoanálisis, define la madurez como la aptitud de querer y trabajar. En otras expresiones, para él un individuo madura es un individuo con la capacidad de enfrentar sus responsabilidades académicas y/o laborales y al tiempo con la capacidad de comunicar privacidad cariñosa y sexual con otra gente. Esta definición abarca realmente bien lo que comprendemos por madurez en psicología. No obstante, agregaré 2 puntos a tomar en consideración para contribuir a entender qué comprendemos por madurez.