?En este momento entendemos que los perros saben varias cosas de nosotros que nosotros no entendemos. Particularmente, los perros fueron entrenados para advertir múltiples géneros de cáncer, para advertir escenarios de azúcar en sangre precipitadamente bajos o conmociones inminentes.
En el momento en que Alexandra Horowitz se encontraba escribiendo su primer libro sobre la cognición canina, le preguntó a una amiga qué le agradaría entender sobre la cabeza de un perro. En ese instante vivía con Maggie, una mestiza de buen carácter. «¿Qué sabe ella de mí?» ella ha dicho. Su contestación se quedó con él, en tanto que no era poco común: la multitud no solamente se pregunta qué opínan sus perros, sino más bien qué opínan de nosotros: ¿ven por medio de nuestros fallos o sienten el cariño que les contamos? .
“La ciencia no afirma nada sobre lo que saben de nosotros. Pero lo cierto es que opínan en nosotros y es asombroso que nos admiren. Aprenden nuestros hábitos suficientemente bien para exhibirnos cuándo nos desviamos de ellos; adelantan nuestras actitudes aun antes que seamos siendo conscientes de ellas. Y, no obstante, no juzgan, están tan contentos de verte en el baño como lo están en la puerta, y no se inmutan por tu desnudez o tu debilidad», escribió Horowitz en un producto para The Atlantic.
Los perros pilosos saben de qué manera interpretar el estado anímico de los humanos y de otros perros, así como prueban 2 estudios científicos.
Los perros tienen la posibilidad de interpretar el estado anímico de los humanos mediante la observación y los sonidos que asocian a cada sentimiento. es la conclusión de 2 estudios completados simultáneamente en USA y Finlandia.
Las dos indagaciones testimonian que los perros saben interpretar los sentimientos humanos.Los estudios asimismo apuntan que los animales no solo perciben las conmuevas humanas, sino asimismo amoldan sus accionar dados estos sentimientos.
Ansiedad y agobio
Un perro puede sentir realmente bien en el momento en que su dueño está ansioso e inclusive puede amoldarse a ese estado anímico. Probablemente el perro ladre o se sienta alterado. Quizá solicita salir a la calle o al patio, se mete corriendo en el apartamento o araña algún mueble. En estas situaciones, es preferible que el dueño y el perro salgan a pasear y entretenerse. En caso contrario, la convivencia puede volverse algo bien difícil.
Múltiples estudios demostraron que los perros aprecian algunas anomalías de la salud en los humanos, incluyendo el cáncer. Como comentábamos, entre perros y dueños probablemente halla un vínculo realmente fuerte. Por este motivo, no es de extrañar que estos pequeños logren avisar de algún problema médico, tanto físico como sensible.
La cara culpable
seguramente ahora estés familiarizado con la cara culpable, así sea que poseas un perro o no, ocupa una aceptable proporción de todos y cada uno de los gifs de calidad en Internet. Si aún no los vió, le sugiero que lleve a cabo una pausa y los busque, con la observación de que son apasionantes y muy viciosos de ver.
Los perros ponen esta cara en el momento en que orinan en sitios inadecuados o rompen cosas que no deberían romperse: la cabeza hacia abajo exponiendo unos ojos gigantes y tristes.
¿Cuándo puede un perro advertir una patología?
Según los estudiosos, y como se publica en la sección Salud de la gaceta ABC: Embarazo. No hay evidencia a nivel científico que explique por qué razón los perros tienen la posibilidad de advertir el embarazo temprano. No obstante, hay un elevado número de casos que prueban que sí. Se ha sugerido que podría deberse a que su favorecido sentido del olfato siente cambios en las hormonas y feromonas de las mujeres embarazadas. Cáncer de próstata. Los perros tienen un sentido del olfato adelantado que les deja detectar compuestos orgánicos volátiles socios con algunos géneros de cáncer en el momento en que se dan a conocer a muestras de aliento, sudor u orina. Entre los cánceres que se demostró que se puede advertir con mayor precisión es el cáncer de próstata. Lo advierten con prácticamente un 99% de precisión. Varias indagaciones de este modo lo prueban. El último fue anunciado en 2014 por el Dr. Gian Luigi Taverna del Hospital de Investigación de Milán. Muerte. Son múltiples las situaciones populares de perros y gatos que demostraron su aptitud para adivinar la desaparición. El primero y mucho más popular es el de Óscar, el gato de una residencia de jubilados de Rhode Island (EEUU) que se acostó al lado de jubilados en el centro exactamente el mismo día de su muerte. Era popular como «el ángel de la desaparición». Después se dieron a conocer otros casos.