Así como enseña en io9 el neurocientífico de la Facultad de Trento Giorgo Vallortigara, el perro siente cariño por sus dueños, y se alegra en el momento en que los halla, de igual forma que un niño se alegra de ver a sus progenitores. Pero su reacción al rencuentro es considerablemente más intensa.
Tener un perro como mascota es algo que indudablemente cambia la vida de alguno, hay quienes llegan a estimar a su perro tal y como si fuera un niño, lo piensan un integrante mucho más de su familia y le dan su amor, no obstante, Sólo algunas de las mascotas tienen exactamente la misma suerte, hay quienes tienen un perro en el hogar como fácil tutor o complemento de su hogar y no le dan el cariño que se merece.
Bastante se charla sobre si los dueños adoran o no a sus mascotas, de qué forma se sienten al tenerlas cerca, pero poco se pregunta o se cuestiona sobre los sentimientos de los perros con relación a sus dueños, qué sienten, de qué manera les perjudica el cariño que tienen la posibilidad de recibir o no, generalmente, de qué forma ser una parte de una familia nuclear asimismo puede cambiar sus vidas y no solo las de sus dueños.
El corazón de un perro y la oxitocina
Un conjunto de estudiosos de Ciencia Animal y Biotecnología, de la Facultad de Azabu (El país nipón), efectuó una sucesión de estudios para comprender el corazón de un perro . Se halló que, en ellos, los sentimientos asimismo tienen un origen cerebral. La conclusión general fue que el vínculo que forman los perros con los humanos es afín al vínculo que forman los pequeños con sus progenitores.
Entre los puntos mucho más atrayentes, corroborado por un producto de la gaceta Science, es el vínculo tan particular que se crea entre perros y humanos por medio de la mirada. El contacto visual estimula claramente el vínculo afectivo entre los dos. Asimismo hace un incremento destacable de oxitocina en los dos, la llamada «hormona del amor».
La relación entre animales y humanos
La conciencia sobre los animales por norma general es cada vez mayor. Cada vez existen más leyes que los resguardan y mucho más personas demandan derechos sobre ellos frente gobiernos y organismos públicos. Este cambio se lo debemos, en parte, al trato con perros y otras mascotas como gatos, pájaros, peces, réptiles, roedores, caballos…
El contacto con ellos y su compañía fué transformador para bastante gente . Ya que bien, las mascotas han despertado la empatía animal en las novedosas generaciones que se ven impulsadas hacia un futuro mucho más justo para el resto seres vivos.
Una cuestión química
‘Perros y humanos distribuyen una parte de la química que enseña el cariño’ dicen, pero no todos la piensan bastante para argumentar el accionar afectivo entre perros y humanos
Relación con los humanos
Nuestra relación inicial con los primeros perros se causó, según estudios genéticos, hace precisamente 32.000 años. Pero no era una relación muy amistosa; a la inversa, era todo lo opuesto, formidablemente hostil.
El inconveniente era primordialmente que los primeros perros heredaron genes salvajes de sus antepasados lobos, pero con el paso de los siglos modificaron su actitud hacia los humanos.